miércoles, 2 de mayo de 2012


1 comentario:

  1. Creo en el mundo como en una margarita
    porque lo veo.
    Pero no pienso en él,
    porque pensar es no comprender.
    El mundo no se ha hecho para que pensemos en él
    (pensar es estar enfermo de los ojos)
    sino para que lo miremos y estemos de acuerdo…
    Yo no tengo filosofía: tengo sentidos…
    Si hablo de la naturaleza
    no es porque sepa lo que es
    sino porque la amo, y la amo por eso,
    porque quien ama nunca sabe lo que ama,
    ni sabe por qué ama, ni qué es amar…
    Amor es la eterna inocencia
    y la única inocencia es no pensar.

    F.Pessoa "El libro del desasosiego"

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